

Comida ligera, sana y saludable: dieta mediterránea. Tan sólo con comer variado y saludable, estás dándole a tu organismo todo lo que necesita, por lo que este es uno de los grandes secretos de la cocina mediterránea, típica de Italia, España, Grecia o Francia. En ella tienes pescados, cereales, legumbres, frutos secos o ensaladas.
Entre los beneficios de la dieta mediterránea sobre el organismo destaca la capacidad de prevenir el asma. Esto se debe a la gran cantidad de antioxidantes que, junto a los ácidos grasos como el Omega 3, combate el asma y otras enfermedades, como la rinitis o las alergias.


Por otro lado, la dieta mediterránea también es eficaz para reducir la presión arterial. Los aceites naturales son buenos para ello, por lo que las personas hipertensas tienen en la cocina mediterránea una fuente de salud importante. Hay quienes, incluso, se atreven a decir que la dieta mediterránea prolonga nuestra vida, lo cual creo que todavía está por probar, aunque sinceramente no me extrañaría que así fuera. La dieta mediterránea es buena para combatir otras enfermedades degenerativas, como el alzheimer.
Además, hay estudios que aseguran que la dieta mediterránea es eficaz para luchar contra ciertos tipos de tumores.
Del mismo modo, no podemos olvidarnos de la fruta dentro de la dieta mediterránea, la cual aporta grandes beneficios al organismo. Además, el aceite de oliva y los frutos secos son buenos para proteger al corazón. El tomate es otro elemento presente en la dieta mediterránea que también aporta beneficios. Al margen de lo expuesto, ¿qué otros beneficios conoces de la dieta mediterránea?