

Cómo mejorar la calidad de vida de las personas mayores
Resulta clave asegurar que los ancianos estén bien cuidados a todos los niveles, así como también que cuenten con compañía durante toda su vida. Asimismo, debemos garantizar que los ancianos van a sentirse seguros, tanto en casa como si se van a vivir a una residencia, que puedan estar activos pero que a la vez tengan tranquilidad a todos los niveles y cuidar también su estado de ánimo.
Entre los consejos que debemos tener en cuenta para mejorar la calidad de vida de las personas mayores encontramos, como nos han recomendado los expertos en residencias de ancianos en Valencia, el visitar a nuestros mayores y mantener el contacto con ellos de manera constante. Para hacerlo podemos dividir las visitas y la responsabilidad de su cuidado entre los diferentes familiares y seres queridos que estamos a su alrededor.
Otra forma muy interesante de mejorar la vida de las personas mayores pasa por sugerirles rutinas diarias que les mantengan activos, animados y felices, y no les hagan caer en el tedio ni en el aburrimiento.
Del mismo modo, otra forma de mejorar la calidad de vida de las personas mayores pasa por estar pendiente de sus controles médicos y de los tratamientos que esté siguiendo esta persona, cuidando al máximo tanto su salud física como su salud mental.
Es muy importante mantener activas a las personas mayores para que puedan mantenerse sanas aunque se encuentren jubiladas y no tengan obligaciones. De nuevo, cabe reseñar que esto resulta especialmente importante tanto en el plano emocional como también en el plano físico.
Es importante también animar a las personas mayores a encontrar actividades que les gusten y que les motiven a estar activas: desde la música y el baile hasta la pintura, pasando por los paseos o la actividad física. Es muy importante que las personas mayores tengan el cuerpo y la mente ocupadas, que su memoria se mantenga estimulada, que su musculatura esté fuerte y que su autoestima esté sana, incluso con el paso del tiempo.
Del mismo modo, el mantener una vida social activa también servirá para que la calidad de vida de las personas mayores mejore durante su vejez. De esta forma, además de mantenernos cerca de ellos si somos sus familiares y seres queridos cercanos, también es importante fomentar que puedan mantenerse cerca de sus círculos, así como crear nuevos círculos sociales sanos en caso de que se trasladen a vivir a una residencia. Es muy importante que se reúnan con sus amistades, que asistan a cursos y a talleres de las aficiones que más les gustan, que salgan de paseo y que puedan realizar viajes de ocio. De esta forma, las personas mayores se sentirán mucho más alegres y podrán olvidarse de las dolencias que suelen afectar a los ancianos durante la edad adulta, disfrutar al máximo de esta etapa de su vida y sentirse saludables y felices en todo momento.
Asimismo, los expertos en ancianos de las residencias consultadas también nos han reseñado que tanto la comprensión como la paciencia serán claves si queremos mejorar la calidad de vida de las personas mayores y de los ancianos. De esta manera conseguiremos que nuestros mayores se sientan bien, siendo especialmente importante el aprender a ponernos en su piel, teniendo en cuenta que todos seremos mayores algún día.
Además, los mayores también deben ser capaces de entender la etapa de la vida en la que se encuentran para poder aceptarla y disfrutarla al máximo, sin que los achaques, la falta de energía y quizá la menor vida social les afecten, fomentando estos aspectos para mantenerse lo más activos posible a todos los niveles: mental, físico, social y anímico.
Finalmente, también debemos tener en cuenta los ingresos mensuales de estas personas mayores. Es fundamental estar atentos a su situación económica, y si en algún momento sentimos que sus ingresos no son suficientes, debemos ayudarles en lo que podamos, ya que esto puede llegar a ser fuente de estrés y depresión para los ancianos que intentan valerse por sí mismos, tienen algún problema de salud y ya no están en edad de trabajar.
Finalmente, tanto si las personas mayores van a vivir en su hogar con supervisión como si van a mudarse a una residencia o acudir a un centro de día, es fundamental asegurarnos de que el lugar en que van a vivir o a pasar su tiempo y a compartirlo con otras personas se encuentra en las mejores condiciones posibles y se adecúa de verdad a todas sus necesidades. Debemos evitar los suelos resbaladizos, el exceso de escaleras, adaptar los baños y en general cuidar al máximo su salud para que puedan disfrutar todo lo que puedan de esta etapa de su vida.