Disfrutar de una vida plena en la tercera edad es posible teniendo en cuenta algunos consejos de salud para las personas mayores. Además, hay residencias en barcelona y por todo el país que nos pueden ser de gran ayuda al contar con expertos capaces de proporcionar los cuidados necesarios que nuestros mayores necesitan.
Los profesionales de las residencias están preparados para prestar los cuidados necesarios, contando con la formación y experiencia para hacerlo del mejor modo posible. Encontrar plazas públicas de residencias de ancianos puede ser una opción a tener en cuenta para darles los cuidados y la atención que necesitan en su día a día.
Alimentación adecuada
Todos sabemos lo importante que es la alimentación pero no siempre somos conscientes de la dificultad de mantener una dieta equilibrada en personas mayores. Su sistema digestivo ya no funciona de una forma tan eficaz como en la juventud y si tienen falta de algunos dientes, tampoco podrán comer todo el tipo de alimentos.
Nuestros mayores necesitan comer varias veces al día y debemos asegurarnos de incluir cantidades suficientes de todos los nutrientes y fibra que ayude su funcionamiento intestinal. Además, debemos asegurarnos que se hidratan adecuadamente, bebiendo agua de forma regular.
Actividad Física diaria
El ejercicio físico es otro pilar importante en la salud de las personas mayores.
La práctica regular de ejercicio físico moderado, adaptado a las situaciones personales de cada individuo, reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, de diabetes, hipertensión y muchos otros problemas de salud. Además, si los mayores se mantienen activos tendrán más facilidad en mantener el equilibrio y se reduce considerablemente el riesgo de caídas y lesiones o enfermedades provocadas por el sedentarismo.
A nivel emocional, salir a diario también ayuda a mantener un buen estado anímico y a dormir mejor.
Por desgracia, muchas veces no tenemos horas suficientes en el día para acompañarlos en sus paseos diarios y no siempre tienen la salud necesaria para salir solos sin que conlleve un peligro para su bienestar.
La importancia de la vida social
Nuestros mayores no tienen una vida laboral activa que los obligue a estar, de algún modo, en contacto con otras personas. Tampoco tienen un grupo de amistades con los que pueden salir de forma habitual, principalmente en las grandes ciudades. Sin embargo, que mantengan una vida social activa es de gran importancia para evitar problemas como la depresión.
Disfrutar de hijos o nietos mejora bastante su nivel de vida pero mantener el contacto con personas de su edad, con las mismas inquietudes y vivencias similares va a suponer una mejoría notable en su estado anímico.
No siempre es posible proporcionarles las condiciones necesarias a nuestros mayores. Sea solos en casa o en casa de familiares, la vida acelerada que llevamos nos impide prestarles la atención que pueden recibir en una residencia.