El verano se aproxima con fuerza y determinación y las altas temperaturas ya se dejan sentir por doquier. Nuestra piel se muestra especialmente sensible ante la extrema calidez de los rayos solares. Los cambios bruscos generados en el clima, derivados de los elevados niveles de contaminación existentes, han provocado que el Astro Solar se convierta en una auténtica amenaza . Hay que cuidar nuestra piel y protegerla, porque los máximos responsables de nuestra salud y bienestar somos nosotros mismos. Si prestamos más atención y respeto a nuestra piel, ella lo agradecerá luciendo con un esplendor que envidiará el mismo Sol.