

Aunque se traten de medicamentos bastantes recientes, se ha podido observar que sus resultados son mucho mejores que los que ya se conseguían con Mysimba, algo a tener en cuenta si estamos ahora buscando nuevas alternativas para tratar la obesidad y ganar el salud.
Cómo la Semaglutida te ayuda a adelgazar
La culpa de no conseguir adelgazar la tienen las hormonas de tu cuerpo. Eso es lo que nos dice la ciencia después de varios estudios que han permitido entender el funcionamiento del sistema hormonal frente a varios estímulos de nuestro día a día. La alimentación, la actividad física, el estrés y las horas de descanso influyen en la forma como responden las hormonas relacionadas con el peso. Eso hará que adelgaces o engordes.
La semaglutida es la versión sintética de la hormona responsable por la quema de grasa en el organismo. O sea, funciona como esa hormona, el Glucagón tipo 1. Este fármaco, investigado para ser utilizado en pacientes con diabetes tipo 2, resultó tener una gran ventaja para curar la obesidad ya que, aumentando la quema de grasa por parte del organismo, consigue muy buenos resultados en la cura de la obesidad, adelgazando y reduciendo la sensación de hambre.
De hecho, en el estudio realizado en varios países, se ha podido verificar que los que tomaban este fármaco perdían cerca de 15% de su peso. Además, se está utilizando en enfermos de diabetes tipo 2 sin que hayan surgido efectos secundarios preocupantes, un dato a tener en cuenta para entender la seguridad del medicamento. De hecho, en los casos en los que hubo alguna molestia, han sido prácticamente a nivel gastrointestinal. Este medicamento está disponible en cápsulas e inyectable, siendo necesaria receta médica para poder adquirirlo.
Otras rutinas para ayudarte a adelgazar
Aparte de hablar con tu médico y tomar el medicamento para adelgazar, hay otras rutinas que te pueden ayudar a conseguir tu peso ideal lo antes posible. Se trata de ayudar la medicación a través de acciones que ayuden al organismo a producir más Glucagón y, así, quemar más grasa a lo largo del día.
Dormir lo suficiente durante la noche es una de las mejores formas de conseguir aumentar los niveles de esta hormona diurna. Aprovecha para dormir tus 8 horas recomendadas y ayuda tu cuerpo a adelgazar. Además, debes evitar los picos de azúcar controlando el tipo de alimentos que consumes. Evita los carbohidratos simples como el azúcar y las harinas blancas.