

¿Qué es la amaxofobia?
Como hemos indicado anteriormente, la amaxofobia es el miedo a conducir. Seguramente conocéis a alguien que no puede coger un volante. Se paraliza. El miedo le invade el cuerpo y es incapaz de mover un sólo músculo. Todo ello indica que sufre este tipo de fobia, es decir, pánico a conducir. Es un miedo que hace que la persona que lo padece se quede paralizada, se bloquee y sea incapaz de reaccionar. Está englobado dentro de los trastornos de ansiedad. Según algunos estudios elaborados por el RACE, el 75% de las personas que sufren amaxofobia en algún momento de su vida, consiguen ponerse otra vez al volante del coche, superando, por tanto, ese miedo que les aborda. Asimismo, también aseguran que en el 95% de los casos son producidos por pensamientos irracionales, factor que debería ser tratado por un psicólogo. Las fobias al volante pueden surgir de muchas maneras. Una de las principales alarmas que suelen producirse es cuando una persona comienza a ponerse excusas para no coger el coche, para no conducir. Digamos que el miedo a reconocer que se sufre una fobia puede ser uno de los principales problemas. También suele aparecer ansiedad cuando se coge un volante, sensación que desaparece cuando se pisa tierra firme.
¿Cuál es la causa de la amaxofobia?
Sus causas son variadas y se produce en un contesto muy determinado, empezando antes de enfrentarse a la conducción o durante esta. Principalmente suele venir ocasionada por haber sufrido una experiencia traumática al volante, como puede ser un accidente de tráfico, la falta de confianza en uno mismo y la falta de experiencia en la conducción.
¿Cómo superar el miedo a conducir?
Hay que analizarse y ver por qué se tiene este problema, qué motiva este miedo a conducir. Una vez localizada la raíz del problema, será más fácil atajarlo. Eso sí, es más que recomendable acudir a un profesional. Y ten en cuenta que como en todas las fobias lo primero es reconocer que se tiene ese problema y querer poder superarlo. Entre las técnicas habituales suelen estar desde las más básicas como son la relajación, ejercicios de respiración diafragmática, con los que aprenderemos a gestionar estos miedos cuando se presente, hasta tener que enfrentarse a la situación de forma virtual con simuladores y gafas de realidad virtual. También puede ser una buena ayuda apuntarse a una autoescuela para hacer un curso de reciclaje o uno específico para superar este miedo. Cuando estés preparado llegará el momento de la verdad, el enfrentarse a la situación a los mandos de un coche, para ello lo mejor es empezar poco a poco, fijándose metas pequeñas e ir narrando en voz alta todo el proceso de la conducción, esto te ayudará a bajar los niveles de ansiedad e irte acostumbrando poco a poco a conducir con tranquilidad. En cualquier caso recuerda que para superar la amaxofobia necesitarás, primero ser consciente de que padeces este problema, segundo querer superarlo y por último ponerte en manos de un psicólogo profesional que te guíe y te ayude en el proceso para vencer el miedo a conducir.
Tengo entendido que las fobias se pasan haciendo muchas veces justamente lo que te da fobia, eso sí con un desfibrilador cerca, por si acaso.
En la carretera es peligroso dar con una persona que conduzca con miedo, mejor que no lo haga o que vaya por sitios poco transitados para perder la fobia.
Repetir, repetir y repetir hasta que se convierta en una costumbre.