El estrés está más que nunca presente en nuestras vidas, convirtiéndose en un problema que afecta a un número cada vez mayor de personas en todo el mundo, en especial en los países más avanzados. El ritmo acelerado de vida que se lleva en las ciudades, la elevada carga de trabajo, la vida sedentaria, los malos hábitos alimentarios o las aglomeraciones de personas y vehículos son factores desencadenantes del estrés.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que es un mecanismo de defensa del organismo ante amenazas externas, por lo que en pequeña medida es necesario y hasta bueno. El problema viene dado cuando esta respuesta natural se produce en exceso, provocando que el organismo se encuentre en un estado de alerta continua, lo que repercute de manera muy significativa en la salud de quien lo padece y provoca la aparición de problemas estomacales, musculares, nerviosismo, dolores de cabeza, falta de memoria y concentración…
A largo plazo puede provocar la aparición de enfermedades, de ahí la importancia de aprender a controlar el estrés para que impida el normal funcionamiento de nuestro cuerpo. Veamos una serie de consejos básicos que nos serán de gran ayuda para controlar el estrés de una manera práctica y efectiva:
– Llevar una vida sana
– Realizar técnicas de relajación. Nos permitirán bajar la tensión arterial, mejorar nuestro estado de ánimo y sentirnos mejor.
– Mantener una buena vida social y familiar activa, comunicativa y rica. De este modo, se podrá controlar mejor el estrés al olvidar la carga laboral y las dificultades del día a día.
– Conocerse a uno mismo y descubrir las causas que originan el estrés. De este modo, podremos aprender a detectar los avisos que anticipan el estrés y podremos controlarlos. También nos permitirá poner el freno si nos estamos cargando de demasiado trabajo o responsabilidades.
– Aprender a relativizar. Hay que tener en cuenta que prácticamente todos los problemas tienen solución. No hay que dejar que nos desequilibren. No hay que preocuparse por situaciones que en la mayoría de ocasiones no van a suceder.
– Planificar nuestro tiempo libre nos va a ayudar el manejo del estrés en nuestra vida.
– Fijar prioridades, tanto en el ámbito profesional como en familiar y personal. Hay que fijarse metas alcanzables y determinar las acciones para alcanzarlas. También hay que priorizar esas acciones para alcanzarlas. Asimismo, es importante conformarse con lo que tenemos y cuidar las expectativas que nos ponemos en la vida familiar, personal y laboral.
– Si se está experimentando síntomas físicos o psicológicos, hay que acudir al médico para que diagnostique el problema y establezca el tratamiento y pautas a seguir. Hay que tener en cuenta que cuanto antes se detecta el estrés, más fácil es tratarlo y aprender a controlarlo.
– No hay que recrearse con los síntomas del estrés y caer en la autocomplacencia, ya que eso sólo ayudará a que los síntomas empeoren en el tiempo.
Debería existir una escuela para aprender a manejar el estres, yo en lo personal cumplo con bastantes criterios para ser portadora de estres, vivo en una ciudad, llevo una mala alimentación, no hago ejercicio, fumo, etc., pero también es cierto que es un tanto dificil no estresarte con el ritmo de vida tan acelerado que se vive aquí, el trabajo, situaciones particulares que se salen de nuestras manos, la carga laboral… Para mi, lo único que me relaja cuando mi estres esta al máximo, es ir un par de días a algúna comunidad fuera de la ciudad, de preferencia donde el celular no tenga señal para así desconectarme totalmente del mundo y asi por lo menos liberar un poco de toda esta energía negativa acumulada en mi cuerpo, eso si, no debo excederme de ese periodo de tiempo, porque comienzo a aburrirme, desesperarme, supongo que mis pulmones a gritos piden el contaminado oxigeno de la ciudad jijijiji….