

El organismo se pone en riesgo cuando se tiene sobrepeso y obesidad porque todo el cuerpo puede verse afectado por la grasa acumulada. Los riesgos y las consecuencias más habituales son las siguientes:
-Posibilidad de desarrollar diabetes, ya que ésta es producida por una alteración del metabolismo de los carbohidratos en la que destaca el exceso de azúcar en la sangre y en la orina.
-Riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular como la hipertensión arterial. Al mismo tiempo, la persona obesa tiene mayores posibilidades de sufrir infartos.
-Problemas con el sueño. Se puede padecer la apnea del sueño que implica dificultades para descansar bien. La persona con obesidad no puede respirar en algunos episodios muy breves de la noche, y el ronquido sería síntoma de esta dificultad.
En otras ocasiones, el trastorno de sueño se manifiesta mediante una somnolencia diurna excesiva. A veces conlleva quedarse dormido continuamente sin poder controlarlo.
-Posibilidad de desarrollar algunos tipos de cáncer. En los varones de próstata y de colon, y en las mujeres de mama, útero, cerviz y endometrio.
-Problemas psicológicos y variaciones en el estado anímico. Los ataques de ansiedad, la depresión y la baja autoestima son muy comunes. Esta enfermedad supone un enorme sufrimiento emocional y puede ocasionar problemas a la hora de relacionarse con los demás.
-Es frecuente padecer problemas respiratorios
-Problemas de colesterol.
-Enfermedades osteoarticulares y osteoartritis. El exceso de peso ocasiones alteraciones en los huesos y en las articulaciones de las rodillas, las caderas y la parte inferior de la espalda.
-Problemas hormonales y problemas para quedarse embarazada.
-Problemas en la vesícula
Vistos los riesgos de la obesidad conviene tener una alimentación sana y evitar por ejemplo los alimentos ultraprocesados