

Los ginsenósidos son propiedades medicinales del ginseng que producen efectos, como el equilibrio de los procesos metabólicos, mejoran el tono muscular, disminuyen el azúcar en sangre, estimulan el sistema endocrino y mantienen los niveles hormonales adecuados e incluso ayudan a mantener y restaurar la capacidad de la célula y así reducir ciertos síntomas de la vejez.
Hay que decir que el ginseng estimula la actividad física y mental, especialmente en pacientes cansados o débiles, crea una barrera defensiva contra los efectos de la tensión física prolongada gracias a sus propiedades medicinales. También actúa como un estimulante mental y estimula las glándulas endocrinas y las glándulas sexuales.
La raíz de ginseng asiático puede estimular el sistema inmunológico, proporciona efectos antioxidantes beneficiosos para el sistema cardiovascular y mejora el rendimiento mental en áreas de la memoria y la concentración; así como aumenta la fertilidad, la líbido y el rendimiento físico y proporciona una mayor sensación de bienestar por las propiedades medicinales que contiene.
En el caso de la raíz de ginseng americano puede ayudar a reducir los niveles de azúcar en sangre en los diabéticos tipo 2 y puede mejorar la función del sistema inmunológico; las personas que consumen ginseng y aprovechan sus propiedades medicinales tienen una incidencia menor de cáncer.


El ginseng y sus propiedades medicinales se consideran seguras cuando se usan por períodos cortos de tiempo, pero tiene efectos estimulantes y pueden producir síntomas, como presión arterial alta, insomnio, dolor de cabeza, vómitos, confusión y ritmo cardíaco irregular.
También puede causar alergia en algunas personas susceptibles; no debes de consumir ginseng si sufres de alguna condición hormonal o si padeces cualquier trastorno de coagulación, ya que el ginseng puede agravar dicha condición.
Yo tomo ginseng coreano y os recomiendo el ginseng ilhwa.